Todas
queremos tener un cutis bello y lozano, y nos
preguntamos qué debemos hacer para conseguirlo. Sin embargo, muchas veces
olvidamos algo básico: observar nuestro rostro. Siempre miramos nuestra cara,
sin embargo no la observamos realmente ya que no ponemos atención al verdadero
estado de nuestra piel. Por ejemplo, si duermes pocas horas tu piel luce opaca. Si por el
contrario, cumples con siete u ocho horas de buen sueño, se ve mucho más
radiante.
Es muy importante mantener a nuestra piel sana
durante la noche, ya que en ese momento esta se dedica a restaurar. Si en el día no trataste
muy bien a tu piel, cuando te vayas a dormir el trabajo será más duro. “Es
muy importante hacer una rutina nocturna, ya que es en la noche cuando el recambio celular es más efectivo”
En esta fase nocturna, los procesos celulares
llegan a su máximo nivel de producción y “reconstrucción” de colágeno y
elastina. Ambos elementos son los responsables de darle a nuestra piel
elasticidad y firmeza. Allí encontrarás el por qué puede lucir marchita si no dormiste tus ocho horas: tu
organismo no ha tenido oportunidad de proceder con la renovación celular.
Ayuda para tu belleza durante la noche
Teniendo en cuenta que tu piel está concentrada en
renovarse, hay varias cosas que puedes hacer para ayudarla en la tarea. Sin
embargo una de la más importante es que trates de tener las horas necesarias
de descanso para que el proceso se complete.
Ayuda a tu piel a respirar: Si te dejas el maquillaje
al irte a dormir, tus poros estarán obstruidos y no recibirán el oxígeno que
necesitan para renovarse. También puede generarte problemas como acné o
irritaciones.
Así que lo primero al llegar a casa después de
una gran noche o un largo día de trabajo es proceder a desmaquillarte. Usa un producto
específico para este fin para que elimines todos los residuos y si es posible después
de usar las toallitas lavarte la cara con un jabón especial para rostro y para
tu tipo de piel.
El siguiente paso es
tonificar. Un
algodón y una loción o agua tónica son suficientes, debes hacerlo dando
pequeños golpecitos en tu rostro para de esta manera cierren tus poros, este tónico
debe corresponder también a tu tipo de piel.
Cuando ya tengas tu piel totalmente limpia debes
comenzar con la hidratación. Lo importante en este paso es escoger una crema
acorde a tu tipo de piel, sin embargo, algunas veces ciertas cremas se adecuan
mejor a nuestro cutis que otras.
Pero así como podemos ayudarlo dejando que los
poros se abran y encontrando una crema para nosotras, también es muy importante
cómo ayudamos a nuestro cutis
desde dentro. Ten siempre como costumbre, mantener un vaso de agua
en tu mesa de noche para que durante tus últimas horas
despierta, tu cuerpo reciba la hidratación que necesita. Esto también ayudará a
que el trabajo de las células de regenerarse sea más sencillo.
Como ves, la
noche es nuestra aliada en lo que a cuidar nuestra piel se
trata, así que a armar tu propia rutina.
Te darás cuenta que aunque al principio te cueste, luego será una costumbre que
te traerá muy buenos resultados.
No hay comentarios:
Publicar un comentario